Relato de Maxime D., Romane T. y Raphaëlle L.

¿Sueño o realidad ?

13. 23h14

Solo quedaba un minuto. Enfadado, tiré mi abrigo al suelo pero hizo un ruido metálico que nunca había oído. Tan sorprendido como yo, el hombre recogió mi abrigo y en un bolsillo encontró una llave. Una llave magnífica de oro, con la silueta de la giganta grabada sobre el mango. Después de un momento de vacilación, se apresuró a poner la llave en la cerradura.

De pronto, estalló una tormenta. La lluvia y el viento disiparon las nubes que nos aprisionabany vimos a lo lejos un relámpago que rompía las rocas a la entrada de la cueva. Lo hemos logrado, los liberamos.

Pero antes de poder celebrar esta victoria, un relámpago iluminó la ciudad tan fuerte que me deslumbró.

Al segundo siguiente me desperté sentado en el café, con la cabeza sobre la mesa. No entendía lo que acababa de pasar. Miraba a mi alrededor y todo era normal, los transeúntes caminaban por la calle y los niños jugaban.

Me di cuenta de que no eran las 23:15, sino las 17:40. Fue entonces cuando Eva llegó disculpándose por llegar tarde. Completamente desorientada le conté mi sueño, el de la leyenda de Giganta. Cuando busqué en mi abrigo lo necesario para pagar el café, mi corazón saltó en mi cuerpo. Saqué la mano del abrigo y descubrí en ella, una llave de oro, grabada con una silueta familiar.